¿Acaso mentía el gran Silvio Fernández cuando decía que "Sevilla no tiene que demostrar que es la ciudad más bonita del mundo"?
Así es Sevilla, un lugar que enamora por sus rincones únicos, piedras antiguas y cantes hondos que se mezclan entre históricos palacios reales y soleadas alamedas, una ciudad que se mece sobre las plateadas aguas del Guadalquivir y es acunada por un cielo tan luminosamente azul que merece escribirle los versos más bellos del mundo.
domingo, 17 de julio de 2011
La luz del atardecer.
Cuando el sol ya se ha ido, el cielo de Sevilla se ilumina de un color especial.
.
When the Sun already has gone away, the sky of Seville is illuminated with a special color.
No hay comentarios:
Publicar un comentario