Sobre sus pasos nos encontramos a Nuestro Padre Jesús despojado de su vestiduras en el momento previo a la crucifixión y a María Santísima de los Dolores y Misericordia acompañada por San Juan Evangelista.
Es digno de resaltar el cuello de esta dolorosa de la Hermandad de Jesús Despojado porque sobre él el escultor Antonio Eslava marcó, a diferencia del resto de dolorosas sevillanas, los músculos del mismo con exageración.