Entre las calles Santa Clara y Torneo hay una pequeña y estrecha callejuela que lleva el nombre de "Arte de la Seda".
Esta calle es el único vestigio que le queda a nuestra ciudad de una época en la que este barrio dedicaba la mayor parte de su población a un gremio industrial de gran arraigo y productividad, eran los telares de San Lorenzo, de calle Yuste o del Compás de San Clemente que tejían tejidos de conocida vistosidad y calidad para el consumo local y para la exportación a Europa y América.
Pues bien, en este vestigio de los gremios tejedores hay un edificio de estilo regionalista con marcado acento mozárabe que está también en ruinas.
Es una pena porque tiene una fachada armónica y bella, con ladrillos bicolores, azulejos y arcos de herradura que en otro lugar hubiera merecido otro trato bien distinto.
este edificio es una subcentral eléctrica que pertenecía a la Compañía Catalana de Gas y Electricidad. Esta sociedad encargó a Don Antonio Arévalo, prestigioso arquitecto de principios del siglo pasado, la edificación de subcentrales eléctricas que acercaran la electricidad a los barrios de la ciudad. Una de ellas fue esta de la Calle Arte de la Seda.
Don Antonio Arévalo utiliza el estilo regionalista, construyendo siempre edificios de dos plantas con unos marcados elementos neomudéjares: ladrillos vistos, azulejos y vidrios de colores, arcos de herradura, parteluces en las ventanas...
En la actualidad son varios edificios de estas características los que subsisten en la ciudad, unos con mejor cuidado que otros, algunos de ellos han sido restaurados como viviendas.
Desde luego, éste de la Calle Arte de la Seda, por su belleza, debería ser digno de una reforma en condiciones.
Between the streets Santa Clara and Torneo there is a small and narrow alley that takes the name of "Art of the silk".
This street is the only vestige that still has our city from an epoch in which this neighborhood was dedicating to an industrial union of great rooting and productivity, they were the looms of The St Lawrence, of Yuste Street or of San Clemente's Compass that made silks of known quality for the local consumption and for the export to Europe and America.
Well then, in this vestige there is a building built in regionalist style with marked Mozarabic art that is also in ruins.
It is a pity because it has a harmonic and beautiful front wall, with two-color bricks, ceramic pieces and horse-shoe arches that in another place had deserved another different well treatment.
Because of the signs placed in the principal door, the building must be some electrical station or something similar.