Uno de los pabellones más bellos de la Exposición Iberoamericana de 1929 es el de Perú. Su mezcla de estilos de ambas márgenes del atlántico resulta de una vistosidad muy agradable.
El Pabellón de Perú es un extraño experimento "neoindigenista". Su autor, Manuel Piqueras Cotolí introduce elementos colonialistas españoles como las balconeras inspiradas en un palacio limeño, el Palacio Torre Tagle del Marques de Torre Tagle. También y que contiene reminiscencias mudéjares. El palacio original data de 1735.
Por otro lado la portada se inspira en la Escuela de Bellas Artes de Lima. El arquitecto, era español (Lucena), pero acumuló experiencia trabajado en Perú, donde realizo la citada Escuela de Bellas Artes o la plaza de San Martín, mezclando elementos andaluces como el ladrillo visto con decoración peruana, normalmente en piedra, esquema que se repite en el Pabellón.
.
One of the most beautiful pavilions of the 1929 Latin-American Exhibition is the pavilion of Peru. The mixture of styles of both margins of the Atlantic Sea gets a very agreeable view.
The Pavilion of Peru is a strange experiment "new indian". His author, Manuel Piqueras Cotolí introduces colonialist Spanish elements like the balconies inspired by an of Lima palace, the Palace Torre Tagle of the Marquess of Torre Tagle. Also it contains Muslim reminiscences. The original palace dates from 1735.
On the other hand the front door is inspired by the Art school of Lima. The architect, Spanish but he accumulated experience working at Peru, where he realized the mentioned Art school or the square of St Martin, mixing Andalusian elements like the brick with Peruvian decoration, normally in stone, scheme that repeats itself in the Pavilion.