Cuando he visitado el Archivo de Indias para ver cualquiera de sus interesantísimas exposiciones raramente me he encontrado con los ventanales exteriores abiertos de par en par para que entre la luz natural o simplemente para poder admirar las extraordinarias vistas del conjunto monumental de la Plaza del Triunfo. Tuve esta suerte hace unos días y aproveché la ocasión para poder tomar estas fotos.
Flanqueada por la Catedral Metropolitana al norte, en el sur por las murallas milenarias del Alcázar y al este por el edificio de la Casa de la Provincia, nos encontramos el monumento dedicado a la Inmaculada (1918) que incluye cuatro esculturas de cuatro importantes personalidades del siglo XVII que se caracterizaron también por su devoción concepcionista y por su relación con la ciudad de Sevilla: el teólogo jesuita Juan de Pineda, el poeta Miguel Cid, el escultor Juan Martínez Montañés y el pintor Bartolomé Esteban Murillo.
Curiosa es esta imagen de la cruz que corona el Monumento. Desde el piso de la plaza poco se puede apreciar de los detalles de este cruz barroca de hierro forjado que toma la forma de cruz patriarcal.
La cruz patriarcal, también denominada cruz arzobispal, es una variante de la cruz cristiana símbolo del cristianismo. Esta cruz conserva la forma de la misma añadiendo una pequeña barra transversal o travesaño por encima de la principal. Por lo general este modelo de cruz es empleada como signo distintivo de arzobispos y patriarcas.