En el Monasterio de la Cartuja, entre los jardines de Colón y la huerta hay un hermoso arco con un no menos sugestivo nombre: Arco de Legos.
Actualmente es el elemento arquitectónico que divide las instalaciones del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo y el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico pero en su momento tenía una función bien distinta.
Pasando el arco se encontraban las habitaciones de los hermanos de la comunidad cartujana, también llamados legos. Estos tenían como misión, además de las propias de la Orden, el sostenimiento de los sacerdotes y estaban dedicados por completo a la vida de oración en las celdas dispuestas en torno al Claustrón.
El arco tiene unas grandes dimensiones y está sostenido por dos columnas, una de ellas con un basa de estilo corintio.
Tras el arco nos encontramos con una sala a modo de zaguán en la que podemos admirar una bella policromía de azulejos ordenados por estilos y colores. Dentro de este maremágnum de azulejos distintos nos encontramos con algunas piezas sueltas en las que se ven imágenes de santos, flores, símbolos diversos, imágenes de soldados y escudos.
El zaguán tiene, a su vez, una puerta de madera que da acceso a la huerta. Enmarcando la puerta existe una composición de azulejos que recuerda a las puertas de los palacios italianos del renacimiento o las villas clásicas romanas.
In the Monastery of the Carthusian Fathers, between the Columbus´s garden and the fruit garden there is a beautiful arch with a not less suggestive name: Arch of Lay people.
Nowadays it is the architectural element that divides the facilities of the Andalusian Center of Contemporary Art and the Andalusian Institute of Historical Heritage but in that moment it had a different function.
Going through the arch we find the rooms of the brothers of the Cartusian community, also so called lay people.
These people had the mission took , besides the own works of the Order, the maintenance of the priests and they were dedicated completely to the life of prayer in the cells arranged concerning the Claustrón.
The arch is very big and is supported by two columns.
After the arch we meet a room like vestibule in which we can admire a beautiful polychrome of tiles arranged by styles and colors.
Inside this maremagnum of different tiles we look some free pieces in which there are seen saints' images, flowers, diverse symbols, soldiers' images and shields.
The vestibule has, in turn, a door of wood that leads to the garden. Framing the door it exists a composition of tiles that remembers on the verge of the Italian palaces of the renaissance or the classic Roman villas.